Pedro Sánchez sabía que aprobaba un estado de alarma que desbordaba la legalidad y ahora el Constitucional da la razón a Vox

Los equipos jurídicos de Pedro Sánchez ya le alertaron de que las limitaciones de derechos fundamentales que decretaba, entraban dentro dl estado de excepción y no de la categoría más suave del estado de alarma.
El presidente del Gobierno quería eludir el control del Parlamento. Y es que, si hubiese tramitado el confinamiento como lo que era, un estado de excepción, debería haber solicitado permiso al Parlamento para aplicar cada restricción de derechos fundamentales. Y temía que el coste de las medidas provocasen una desbandada de sus socios políticos.
Vox ha conseguido ahora que el Tribunal Constitucional declare la ilegalidad del estado de alarma decretado por Pedro Sánchez. La ponencia del magistrado Pedro González-Trevijano aprobada por el máximo garante de la Constitución deja claro que las medidas decretadas por el Gobierno afectaban a derechos fundamentales protegidos al máximo nivel por la Constitución Española.
Por lo tanto, las restricciones de esos derechos se deberían haber solicitado al Parlamento por el mecanismo de adopción de un estado de excepción y no de uno de alarma.
La sentencia contagia ahora, además, a la validez de todas las multas impuestas durante el estado de alarma, que decaen al no existir una norma legal que las avale jurídicamente.