Con el fin del 2020 a la vuelta de la esquina, toca hacer balance. Uno de los datos más desgarradores es el que apunta a que en España han tenido que cerrar 68.000 empresas por la pandemia.

La pandemia que ha afectado durante este 2020 a España y al mundo entero se ha llevado por delante miles de negocios. Las restricciones de movilidad y de convivencia han obligado a muchos empresarios a cerrar sus establecimientos. Y no son pocos. Un total de 68.000 empresas han echado el cierre.
Detrás de este contundente dato se esconde una cruda realidad que ha golpeado a miles de familias. Los afectados en mayor medida han sido principalmente aquellos con negocios de hostelería, restauración, pequeños comercios de proximidad o actividades relacionadas con el turismo.
Dentro de las empresa, quienes peor lo están pasando son las empresas pequeñas. De hecho, con los datos en la mano, un 99,7% de las casi 68.000 empresas que se han destruido durante este 2020 en España cuentan con menos de 50 trabajadores en su plantilla.
Los autónomos del sector hostelero han sido los peores parados. En total, 430.000 trabajadores por cuenta propia han solicitado la prestación por cese extraordinario de actividad. El principal motivo de los cierres apunta al severo estado de alarma del pasado mes de marzo y los pocos ingresos tras en la llamada ‘nueva normalidad’.
Además de la hostelería, el comercio, que en noviembre perdió 210 autónomos, y la industria manufacturera se han visto muy perjudicadas por la pandemia. Los datos de la Seguridad Social así lo confirman, al que muestran la cruda realidad: de las 1.468.620 empresas registradas en enero han desaparecido un total de 68.228 hasta el mes de octubre.